Ikigai: el propósito de la vida

Ikigai

Ikigai

Mucho se habla sobre Japón y su estilo de vida, de lo longeva de su población, y de su filosofía de vida. Una de las cosas que más destacan dentro de esto, es el “Ikigai”, una palabra japonesa que se refiere al propósito de la vida.

En varias ocasiones mencionamos cómo, en Japón, al ser un país que valora más la sociedad, que la individualidad, muchas veces las personas abandonan las cosas que en verdad aman, o incluso sus propias opiniones o sentimientos de lado, por el bien común. Hablamos de ciertas costumbres sociales, y normas no escritas, como el “Honne y Tatemae”, que casi obliga a que todos sean cordiales con los demás, sin importar las circunstancias.

Sin olvidar, claro, la constante presión social sobre tener una “buena vida”, matándose en los estudios, para luego cambiar su vida social y familiar, por un trabajo explotador. No es ningún secreto que la tasa tan alta de suicidios se debe en mayor parte a esta presión, pero, ¿es todo tan malo?

Pese a que siempre se están señalando estas cosas malas, también hay otras muy buenas. En el caso del Ikigai, se tiene una filosofía en la cual la persona se centra en lo que realmente quiere, en aquello para lo que ha nacido, y que quiere hacer por el resto de su vida.

 

¿Para qué sirve?

El Ikigai es una filosofía que se aplica para encontrar “la razón de vivir”, aquello en lo que eres bueno, y en lo que puedes centrar tu vida, para tener una mejor calidad de la misma.

Siguiendo una serie de pasos y preguntas, el Ikigai te ayuda con esta duda milenaria, sobre la razón de la existencia. Al no vivir con esta constante duda, muchos aspectos de la vida mejoran.

De hecho, este término nació durante las investigaciones, acerca de por qué en ciertas zonas de Japón la esperanza de vida era tan alta. En la que se descubrió que estos lugares mantenían un estilo de vida único, haciendo de sus habitantes felices, saludables y trabajadores.

Al igual que el budismo, esto es algo que se puede practicar sin importar el sitio, la época, o cualquier otro factor, por lo que podemos implementarlo en nuestras vidas sin ningún problema.

Este puede ser aplicado para cualquier ámbito, ya sea artístico, cultural, social, espiritual, o de trabajo. Motiva a las personas, dándole fuerzas, al dejar en claro cuál es la razón por la que deben levantarse cada mañana, y esforzarse.

Está vinculado a la pasión y las habilidades, siendo único y diferente para cada persona.

Ikigai

Las preguntas que se deben hacer

El Ikigai es una pasión, a la vez que una misión, una vocación y una profesión. Por esto, hay ciertas preguntas específicas que debemos hacernos si queremos averiguar cuál es el propósito de la vida.

 

¿Qué amas hacer?

Lo principal es pararte a pensar, qué es lo que realmente amas hacer, en cualquier ámbito de tu vida. Puede ser que ames dibujar, así como podrías amar cocinar o leer.

Usualmente, hay varias cosas que amamos, y nos hacen felices, aun si no somos buenos en ello, o si no se tiene mucho tiempo para dedicarle usualmente.

Es importante tener en cuenta todas las cosas que puedan quedar en esta categoría, sin importar cuáles sean.

 

¿En qué eres bueno?

Lo siguiente, es tomar estas cosas que amas hacer, y ser sincero en lo que realmente tienes cierto talento.

Por supuesto, si apenas se inicia con un nuevo hobby, es normal no tener grandes habilidades, pero, en este caso, también se debe tener en cuenta la cantidad de tiempo que se le quiere dedicar, para poder mejorar.

 

¿Para qué eres necesario en este mundo?

Esta es una pregunta que puede ser extremadamente difícil, o, por el contrario, sumamente fácil, dependiendo de la persona, y de su Ikigai.

¿Cómo saber para qué somos necesarios? Más que pensar en qué provecho puede sacar el mundo de ti, tienes que pensar en qué puedes ofrecerle al mundo con esto que amas. Lo que ofreces puede ser cualquier tipo de cosa que sume, ya sea un invento, o simplemente el transmitir una emoción con un arte.

 

¿Es rentable?

Aunque pueda parecer contradictorio buscar tu Ikigai basándote en el dinero que puedes sacar de ello, lo cierto es que este es el punto más importante.

No se trata de buscar aquello que te dé la mayor de las riquezas, no obstante, al tener un estilo de vida basado en el Ikigai, vives y te sustentas de aquello que te apasiona. Siendo así, debe ser algo que pueda convertirse, en cierta forma, en un trabajo.

Antes que nada, hay que recordar que en estos últimos años la cantidad de trabajos existentes se ha multiplicado debido a las nuevas formas de trabajo. Por ello, es más fácil buscar la manera de vivir de casi cualquier cosa.

 

El estilo de vida Ikigai

No hay que detenerse al descubrir el propósito de la vida. Al contrario, eso es solamente el comienzo.

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